Aunque pasé una noche increíble, la maldita tos no me dejó dormir, así que durante el día estuve bien cansada... Eso y la resaca de las cervezas.
Con todo y eso, en pleno domingo me fui a la oficina dispuesta a terminar el portafolio... Pero no duré mucho tiempo porque no me rindió y el agotamiento me pudo más. Regresé a casa y me puse el primer capítulo de la casa de papel.
Después me encontré con un podcast que habla sobre el amor propio y me di cuenta que me doy mucho palo, así que decidí escribir en mi diario (sí, yo tengo un diario en el que rajo de todo el mundo, hasta de mí) y me sentí más tranquila.
Al final me tomé una dosis de mis esencias florales para poder descansar y a las 8 PM ya estaba durmiendo.
Recuerden que pueden ver el proceso en las InstaStories de mi página de Instagram, y también pueden darle click derecho a la imagen y seleccionar abrir enlace en una pestaña nueva para verla en tamaño real.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Deja aquí tu comentario!